"Veintinueve Almas Perdidas, más una"

 

La siguiente regresión se realizó el día 14 de enero del año 2015.

 

 

Esta experiencia también pertenece al paciente anterior. La comparto con ustedes porque me parece muy interesante el contenido y  desarrollo de esta regresión, tanto para mi, como para mi consultante. Este llegó a su segunda sesión, con el fin de encontrar una respuesta al hecho de que siempre ha buscado "la perfección" en una relación de pareja, disfruta estar acompañado, pero cuando comienza a idealizar la relación, siente que no está satisfecho con lo que tiene. Desde esta problemática, comenzamos el trabajo, sin imaginar que el desenlace sería realmente impresionante.

 

Luego de la inducción correspondiente, le solicito a mi paciente que vaya al momento exacto en el que comenzó a idealizar sus relaciones de pareja, él a su vez, me dice que está en un lugar oscuro en donde se percibe mucha paz, al moverse por ese espacio, comienza a percibir una luz amarilla muy agradable, la cual se transforma luego en luz blanca. El paciente me manifiesta que se siente feliz, seguro, contento en esa luz. Al solicitarle que viera si se encontraba alguien más en ese lugar con él, me dice al instante, que está su hermana (de esta vida) quién le solicita ayuda. Le pido que me permita hablar con ella para saber por que esta ahí en su regresión, y por qué necesita ayuda. El acepta y comienzo el diálogo con su hermana (esto se puede realizar a través de una técnica, en donde el paciente presta sus cuerdas vocales a otra energía, diferente a la del paciente, para que esta se pueda comunicar).

 

Una vez que se inicia la conversación con su hermana, y al preguntarle qué es lo que le sucede, ella me responde que se siente cansada, enferma y que hay muchas energías adheridas en su campo energético. Al escuchar esto, le pido que me indique con los dedos de sus manos cuántas energías cree que hay, a lo que ella me responde que son veintinueve, la mayoría Almas pérdidas de familiares y amigos de ella y de mi paciente. Como correspondía hacer, realizamos el trabajo de ayudar a estas Almas a seguir su tránsito y enviarlas a la luz, a lo cual todas aceptaron de inmediato, mencionando que estaban esperando este momento para hacerlo, y que se habían quedado en su campo vibracional, porque ella irradiaba una luz muy cariñosa y cálida, y también porque sentían mucho cariño y no querían dejarla sola. Luego de esto, ella me pide que le ayude a saber que le está sucediendo a una amiga que está viviendo en su casa (todo esto transcurriendo en la regresión de mi paciente), siente que no está bien y que desde hace algún tiempo ha cambiado su comportamiento y carácter. Le pido que me preste sus cuerdas vocales para hablar con su amiga, ella accede y comienzo mi conversación. Al contactar a su amiga, ella de inmediato me revela que también se siente cansada y que una parte del Alma de su marido, fallecido algunos años atrás, aún la acompaña. De inmediato, le solicité que le prestara sus cuerdas vocales a su marido para que yo pudiera conversar con él, ella acepta. Cuando comienzo mi conversación con él, le pregunto si tiene conciencia de que ya murió, a lo que él me responde que si sabe que ya no tiene su cuerpo físico, pero que no quiere irse porque aún ama a su esposa y a su hijo, sentía que estando junto a ella la protegía. Luego de realizar el trabajo correspondiente con esta Alma perdida, haciéndole entender que ya no era necesario que siguiera estando en este plano y menos adherido al campo vibracional de su esposa, se desprende e inicia su tránsito hacia la luz.

 

Luego de esta experiencia, nuevamente le solicito a mi paciente que vaya a la situación que origina el motivo de su consulta, esta vez, se ve en año 1725, en donde es una mujer de clase alta y que es pretendida por un hombre apuesto y gentil, del cual está profundamente enamorada. Es muy feliz y comparte con él el gusto de los paseos por los parques y jardines de la época, pero repentinamente, este hombre la abandona y ella nunca más vuelve a saber de él, situación que la deja muy mal emocionalmente y tremendamente desilusionada. Nunca vuelve a tener un nuevo pretendiente y muere idealizando el amor, con el deseo perdido de haber sido feliz. Termino la sesión desprogramando este evento y tratando de que el paciente tome conciencia de que esto, sucedió en otro momento y en otras circunstancias.

 

Actualmente, el consultante ha empezado a entender por que su vida transcurría de cierta manera, ya no se preocupa por tener una relación "perfecta", ahora sabe que si llega alguien a su vida, tendrá la confianza suficiente para entablar una relación mas duradera.